IGLESIA EVANGÉLICA INTEGRAL
LOS QUECHUA
UN PUEBLO AMADO POR DIOS
Hoy
podemos contemplar con gran regocijo el día de misericordia de Dios para su
pueblo amado: Los Quechua
Citas
Bíblicas tomadas de la Santa Biblia, RVR
1960 - Año 2018 - Publicado para la comunidad Quechua, Aimara y otras
comunidades indígenas del el Perú - Bajo la dirección del proyecto Sembrando
Semilla - El Evangelio Integral al Servicio de Jesucristo en Todas las
Naciones.
Este material ha sido preparado cuidadosamente para
capacitar a algunas comunidades quechuas, Aimaras y otras etnias del Perú, que
a través de la visitación de Dios y el avivamiento originado por el Espíritu
Santo en este pueblo INCA, buscan capacitarse cada día más para servirle al
Señor como instrumentos de bendición dentro y fuera de su país.
Bibliología y Método
de Estudio
Bibliología
Doctrinas
Las sagradas escrituras.
Actitud correcta para estudiar provechosamente
las Escrituras. No hay libro más maravilloso que la Santa
Biblia. Es el producto del corazón de Dios, en ella se registran declaraciones
de hombres y acontecimientos históricos siendo infalible en esta materia.
Así como para apreciar debidamente la poesía
se requiere poseer un sentimiento especial hacia lo bello y poético, para el
estudio de la filosofía es necesario un espíritu filósofo, así también es de la
mayor importancia una disposición especial para el estudio provechoso de la
Sagrada Escritura.
¿Cómo podrá una persona irreverente, ligera,
impaciente e imprudente, estudiar e interpretar debidamente un libro tan
profundo y altamente espiritual como lo
es la Biblia?
Necesariamente, tal persona juzgará de su
contenido como el ciego de los colores. Para el estudio y recta comprensión de
la misma, se requiere pues, por lo menos un espíritu respetuoso y dócil, amante
de la verdad, paciente en el estudio y dotado de prudencia.
El Espíritu Santo que está en nosotros, está
disponible para prepararnos y darnos lo que necesitamos (Juan 14: 17; 1ª Juan
2: 27). Cuando anhelamos con ferviente deseo estudiar la Santa Biblia para
conocer a Jesús. “Aparte explicaba todo a sus discípulos”, “les abrió el
sentido para que entendiesen las Escrituras”. Las condiciones precisas y
provechosas que se deben observar son: La oración, la súplica.
Nunca se debe emprender el estudio sin haber
pedido al Maestro que abra nuestro entendimiento y nos aclare su palabra.
(Salmos 119: 18, 26, 34, 37, 99, 104; Lucas 24: 45; Santiago 1: 7 – 7).
Introducción bíblica general. Es un estudio que investiga todas las cuestiones pertinentes a un
entendimiento de la Biblia como nuestra regla de fe y normativa de la conducta
humana, pues con claridad nos dice cómo comportarnos para que vivamos en paz
con Dios, con nosotros mismos y con los demás, tanto en nuestro hogar, como en
cualquier lugar y para que aprendamos a enfrentar las adversidades de la vida.
Escritores.
La Biblia tiene un solo autor: El Espíritu
Santo, pero varios escritores, aproximadamente 40, escribieron en diferentes
épocas, es decir, todos no vivieron en el mismo tiempo, cada uno escribió en su
respectiva época.
Idioma.
La Biblia fue escrita en tres (3) idiomas:
Hebreo
Arameo
Griego.
Antiguo Testamento. Fue
escrito en su totalidad en hebreo (Por ser este idioma propio de los judíos),
excepto unas pequeñas partes en arameo (Por ser esta la lengua propia de la
tierra a donde fueron llevados cautivos): Esdras 4: 8; 6: 18; 7: 12 – 26;
Jeremías 10: 11; Daniel 2: 4; 7: 28.
Nuevo testamento. Fue
escrito en su totalidad en griego (Por ser este el idioma de mucha gente en
palestina, Asia Menor y Europa Mediterránea. Se escribió en el griego del
pueblo: El Coiné. Esta era la lengua común del mundo helénico). Excepto unas
pequeñas partes en arameo (Por ser este el idioma que se usó en Palestina
después del cautiverio. El arameo fue el idioma que habló Cristo: Mateo 27: 46;
Marcos 5: 41; 15: 34; Romanos 8: 15; 1ª Corintios 16: 22; Gálatas 4: 6.
Períodos
Lo narrado en la Biblia comprende, abarca y se
clasifica en cinco (5) grandes períodos:
Patriarcal.
Jueces.
Monarquía.
Cautividad, Exilio y Regreso.
Neo testamentario.
Tiempo
Toda la Biblia fue escrita en un lapso de
tiempo de 1.600 años aproximadamente.
Esto se explica de la siguiente manera:
El primer hombre creado por Dios fue Adán.
Algunos años después vinieron Noé, Abraham, Jacob y otros respectivamente.
Sin embargo, ninguno de ellos es mencionado en
la Biblia como escritor. El primer hombre que la Biblia menciona como escritor
de las sagradas escrituras es Moisés.
“Y Jehová dijo a Moisés: Escribe esto para
memoria en un libro”… (Éxodo 17: 14).
“Y Jehová dijo a Moisés: Escribe estas
palabras;…(Éxodo 34: 27).
“…y escribió en las tablas las palabras del
pacto, los diez mandamientos” (Éxodo 34: 28).
“…acabó Moisés de escribir las palabras de
esta ley en un libro…” (Deuteronomio 31:
24).
Jesús hablando se Moisés dijo: “…de mi
escribió él” (Juan 5: 46).
“---sus
escritos…” (Juan 5: 47).
Muchas
otras citas también confirman esto.
Y el último hombre que la Biblia menciona como
escritor de las Sagradas Escrituras es Juan, dice apocalipsis 1: 9: “yo,
Juan, vuestro hermano…”, 1: 10. “…estaba en el espíritu; y oí detrás de mí una
gran voz”; Juan 1: 11. “…que decía;… escribe en un libro lo que ves…”
Desde los primeros siglos se consideró que se
refiere a Juan el apóstol, aproximadamente en el año 100 d. C. , así pues, se
considera que el tiempo empleado para escribir toda la Biblia fue de 1.600
años, por cuanto estos fueron aproximadamente los años que pasaron desde Moisés
hasta Juan.
El tiempo se comienza a contar desde Moisés y
se termina en Juan por cuanto Moisés fue quien comenzó a escribir y Juan quien
terminó. Y entre ellos escribieron el resto de los escritores bíblicos.
Desde Juan hasta nosotros han pasado
aproximadamente 1.900 años.
Territorio
Lo narrado en la Biblia tuvo lugar en tres
continentes: Asia, África y Europa.
EJEMPLOS:
Canaán: La
tierra que Dios prometió a Abraham se
encuentra en el continente de Asia.
Egipto: La
tierra de la que Dios sacó a su pueblo se encuentra en el continente de África.
Roma: La ciudad donde el
apóstol Pablo termina su último viaje, se encuentra en el continente de Europa.
Y así sucesivamente con todos los lugares de
la tierra mencionados en la Biblia, corresponden a alguno de estos tres
continentes.
Nombres.
Son tres (3) los nombres que se aplican a toda
la Biblia, de estos tres, dos son divinos, es decir, inspirados por el Espíritu
Santo y uno es humano, Son los siguientes:
BIBLIA ------------------------------------------------------------Nombre
humano
PALABRA DE DIOS---------------------------------------------Nombre
Divino
SAGRADAS ESCRITURAS
------------------------------------Nombre Divino
Significado de la palabra Biblia.
A pesar de que la Biblia se llama Biblia, no
está en la Biblia. Por eso este nombre es humano, es decir, se lo puso el
hombre. En sus comienzos, la Palabra de Dios escrita no era un solo libro como
lo tenemos hoy, sino que cada libro estaba suelto en forma de rollo o
pergaminos separados los unos de los otros, por cuanto habían sido escritos por
diferentes personas en diferentes épocas.
Es por eso que cuando Jesús fue a la
sinagoga en Nazaret, no se le dio toda
la Biblia, sino únicamente “…el libro del profeta Isaías,…” (Lucas
4:17), y cuando terminó, “…enrollando el libro lo dio al ministro…” (Lucas
4: 20). Lo que significa que era un rollo. De igual manera, el etíope y el
eunuco cuando regresaba a su país, no estaba leyendo toda la Biblia, sino
únicamente “al profeta Isaías” (Hechos (: 18).
Al pasar el tiempo se consideró la posibilidad
de reunir todos los libros en uno solo, lo que se hizo una realidad. Entonces
buscaron un nombre que concordaba con este propósito, y el nombre más apropiado
para ello fue “BIBLION”, que en castellano es “BIBLIA” (traducido
del griego “biblio” y significa “libros”.
De esta forma se entiende que la Biblia es la
unión de varios libros en uno solo.
Cerca del año 400 d. C., Jerónimo compendió la
Biblia y la llamó las Sagradas Escrituras “la biblioteca divina”, desde ese
tiempo los escritores cristianos han aplicado la palabra Biblia a la colección
de todos los libros divinamente inspirados.
Palabra de Dios.
Se llamó así de parte del mismo Dios para distinguirla
de la palabra de los hombres. El nombre “PALABRA DE DIOS” es divino, por cuanto
aparece escrito en la misma Biblia. (Lucas 8: 11; Romanos 10: 17; Hebreos 4:
12).
Sagradas Escrituras.
Se llamó así para distinguirla de los escritos
no sagrados. Escritos habían muchos, pero sagrados solamente estos.
El nombre “SAGRADAS ESCRITURAS” es divino, por
cuanto aparece escrito en la misma Biblia. (2ª Timoteo 3: 15).
División de la Biblia.
Se divide en dos (2) partes de expresión
bastante desiguales llamadas Antiguo y Nuevo Testamento.
Antiguo testamento. Es la
primera parte de la Biblia, y a su vez se organiza en cierto número de libros.
Nuevo Testamento. Es la
segunda parte de la Biblia y al igual que el antiguo testamento, también se
organiza en cierto número de libros.
Testamento.
Esta palabra significa “Pacto”, es derivada
del latín testamentum que a su vez tiene vínculo con el hebreo verti que
significa: “pacto o alianza”. Con este “pacto o alianza” se designa el lazo
de unión que el Señor estableció con su pueblo en el monte Sinaí por medio
de Moisés, para obediencia de la ley de Dios por parte del pueblo y se confirmó
a través de la sangre de los animales (Éxodo 24: 3 - 8). Los profetas contrapusieron una “nueva
alianza” que no estaría escrita, como la antigua, sobre tablas de piedra, sino
en el corazón de las personas con el Espíritu Santo del Señor (Jeremías 31: 31
– 34; Ezequiel 36: 26 – 27).
De ahí la distinción entre “antigua” y la
“nueva alianza”. La primera, sellada en el Sinaí, fue ratificada con
sacrificios de animales, la segunda fue establecida con la sangre de Cristo,
derramada en la cruz del calvario.
El termino hebreo vertí se tradujo al griego con la palabra diatheke,
que significa: “disposición, arreglo”, y de ahí “última disposición” o “última
voluntad”, es decir, “Testamento”. De este modo la versión griega de la Biblia,
conocida con el nombre de Septuaginta o traducción de los Setenta (LXX), quiso
poner de relieve que el pacto o alianza era un don y una gracia de Dios y no el
fruto o el resultado de una decisión humana (Hebreos 8: 9; 11 – 28).
La palabra griega diatheke fue luego traducida
al latín por testamentum y de allí pasó a las lenguas modernas. Por eso
se habla corrientemente del Antiguo y del Nuevo Testamento.
La misma palabra griega significa “pacto” como “testamento”. Así pues, el
significado de estos nombres concuerda con el contenido, pues el Antiguo
Testamento (Antiguo Pacto) casi en su totalidad muestra el pacto de Dios con su
pueblo Israel. Y el Nuevo Testamento (Nuevo Pacto), muestra el nuevo pacto a
través de la sangre de Jesucristo, que por muchos fue derramada para remisión
de los pecados (Mateo 26: 28).
Causa. Los nombres “Antiguo
Testamento” y “Nuevo Testamento” se usan desde el final del siglo II con el fin
de distinguir entre las escrituras cristianas (Nuevo Testamento) y las judías
(Antiguo Testamento).
Libros.
Como ya lo vimos, la Biblia es la unión de
varios libros y éstos forman las dos (2) grandes partes de la Biblia (Antiguo y
Nuevo Testamento).
El antiguo testamento contiene 39 libros
divididos en cinco (5) partes:
La Ley o Pentateuco (5 libros).
Libros Históricos (12 libros).
Libros Poéticos (5 libros).
Profetas Mayores (5 libros).
Profetas Menores (12 libros).
El Nuevo testamento contiene 27 libros, que
pueden dividirse así:
Históricos (5 libros).
Doctrinales (21 libros).
Epístolas de Pablo (14 libros).
Epístolas Generales (7 libros).
Proféticos (1 libros).
UNA VISIÓN GENERAL DE LA BIBLIA
La
Biblia se divide en dos grandes tomos: el Antiguo y el Nuevo Testamentos.
Recordemos que la Biblia no es un solo libro, sino una colección de libros y
escritos, la cual consta de 66 libros.
1. EL ANTIGUO TESTAMENTO (o Antiguo Pacto de Dios
con los hombres), es el relato de las relaciones de Dios con el hombre desde la
creación hasta unos 400 años antes de Cristo. Éste consta de 39 libros, y
podemos dividirlo en cinco secciones:
a. El Pentateuco (del griego penta = cinco y teuchos = volumen). Son los primeros 5
libros, escritos por Moisés alrededor del año 1440 a.C., y que sientan las
bases de toda la revelación bíblica posterior.
1. Anótalos abajo en el orden en que los
encuentras en la Biblia, y lee sus temas centrales.
2. Génesis: El Libro de
los Orígenes: la creación; la caída; la promesa de
redención; nacimiento de Israel como nación escogida por Dios.
3. Éxodo: La liberación
de Israel de la esclavitud en Egipto.
4. Levítico: Leyes para el
sacerdocio y el pueblo; leyes de santidad y para la adoración.
5. Números
Desobediencia y peregrinaje de Israel en el desierto por 40
años.
6. Deuteronomio: Los grandes discursos de Moisés preparando al pueblo para entraren la
tierra prometida, con las promesas y amonestaciones de Dios a Israel.
b. Los Libros Históricos. Los siguientes 12 libros, escritos entre los años 1100 a 600 a.C.,
describen el trato
Entre Dios y su pueblo
escogido. Anótalos en orden:
c. Los Libros Poéticos. Son los siguientes 5 libros, que describen
poéticamente la grandeza de Dios y su trato con el ser humano, y las
experiencias y crisis espirituales de este último. Escríbelos por orden:
1. Job: Sufrimiento y fiel confianza de un hombre que
amó a Dios.
2. Salmos: Cánticos de alabanza y adoración a Dios, así
como instrucción al hombre.
3. Proverbios: Sabiduría práctica para una vida próspera.
4. Eclesiastés: Vanidad de la vida terrenal.
5. Cantar de los
Cantares: Cuadro simbólico del amor de Dios por su pueblo.
d. Los Profetas Mayores. Son mensajes de Dios a Israel por medio de
los profetas, hombres llamados específicamente para ello. Se les llama Mayores
sólo porque son más extensos que los otros y no porque sean más importantes.
Fueron escritos entre los años 750 a 550 a.C.
(1)
Isaias (3)
Lamentaciones (5)Daniel
(2)Jeremías (4) Ezequiel
e. Los Profetas Menores. Son los últimos 12 libros del Antiguo
Testamento, escritos entre los años 800 a 400 a.C., con
1. EL NUEVO
TESTAMENTO
O Nuevo Pacto de Dios con los hombres, revela a Cristo como el Redentor
de la humanidad. Relata su vida, enseñanzas y principios para la vida
cristiana. Éste consta de 27 libros, que se dividen en:
a. Los Evangelios. Relatan la vida, obra y
enseñanzas de Jesús. Anótalos y fíjate en los temas correspondientes:
1. Mateo: La vida de Cristo,
escrita especialmente para los judíos, revelando a Jesús como el Mesías
esperado por ellos.
2. Marcos: Jesús como el Siervo de Dios.
3. Lucas: Jesús como el hombre perfecto, enfatizando su
humildad.
4. Juan: Jesús como el Hijo de Dios, destacando su
divinidad.
a. Los Hechos de los Apóstoles. Es un libro histórico que trata del inicio y
la expansión de la Iglesia durante la era apostólica. Muchos prefieren llamarlo
“Los Hechos del Espíritu Santo”, su verdadero autor, quien sigue obrando hasta
el día de hoy en medio y por medio de su Iglesia.
a. Las Epístolas. Los siguientes 21 libros
son cartas o epístolas escritas a personas, iglesias o a los creyentes en
general, tocando aspectos de la fe y la responsabilidad cristianas. Escríbelos
en el orden en que los hallas:
5. Epístolas
de Pablo:
a. Romanos
b. 1a a los Corintios
c. 2a a los Corintios
d. A los Gálatas
e. A los Efesios
f. A los Filipenses
g. A los Colosenses
h. 1ra. A los Tesalonicenses
i. 2da a los Tesalonicenses
j. 1ra a Timoteo
k. 2do a Timoteo
l. A Tito
m. A Filemón
6. Epístolas
Generales:
a. A los Hebreos
b. Santiago
c. 1a de Pedro
d. 2a de Pedro
e. 1ra de juan
f. 2da de juan
g. 3ra de juan
h. judas
7. Apocalipsis.
El último
libro del Nuevo Testamento es un libro profético, que describe los
acontecimientos de los últimos tiempos, incluyendo la 2a. Venida de
Cristo, el establecimiento de su Reino, la gloria futura y el destino final de
creyentes e incrédulos.
Notas adicionales sólo para el discipulador sobre los libros de la
Biblia:
Los Libros Deutero-canónicos (Segundo Canon) o
Apócrifos (escondidos u ocultos) son obtenidos de la Biblia griega de los
setenta (Septuaginta); estos no fueron aceptados por los judíos ni por los
cristianos cuando se conformó el canon bíblico, aunque sí fueron reconocidos
como obras humanas de carácter histórico. En el siglo XVI la iglesia de Roma los
aceptaría en el Concilio de Trento.
Hay cinco (5) libros que por ser tan breves,
no tienen capítulos, sino únicamente versículos, estos son:
ABDIAS ---------------- 21 versículos
FILEMON ------------- 25 versículos
2ª DE JUAN ---------- 13 versículos
3ª DE JUAN ---------- 15 versículos
JUDAS ---------------- 25 versículos.
Esto hace que 2ª de Juan sea el libro más
corto de toda la Biblia.
1.14.2. Versículos. Son los números pequeños
que siguen a los capítulos.
EJEMPLO:
SALMO 134 Exhortación a los guardas del
templo
Cántico gradual
134 Mirad, bendecid a Jehová, vosotros todos los
siervos de Jehová,
Los que en la casa de
Jehová estáis por las noches
Versículos --------2 Alzad vuestras manos al santuario, y
bendecid a Jehová.
3 Desde Sión te bendiga
Jehová, el cual ha hecho los cielos y la tierra.
Notamos que el Número 1 del primer versículo
se omite, y en su lugar está el número del capítulo.
Esto ocurre en todos los capítulos de todos
los libros.
Al igual que con los capítulos, los escritos
originales de la Biblia tampoco estaban organizados en versículos; esto quiere
decir que la numeración en versículos que hallamos en los libros de la Biblia
tampoco fue inspiración del Espíritu Santo, sino una contribución humana que se
hizo muchos años después de haber sido anexados los capítulos para facilitar
aún más el uso y estudio de la Biblia.
Se dice que Roberto Sthefanos en el año 1,551
d. C, organizó toda la Biblia en versículos. Era impresor propietario. Se dice
que publicó la Biblia organizada en capítulos y versículos en el año 1.560 d.
C.
El capítulo de la Biblia que tiene el mayor
número de versículos es el Salmo 119, el cual tiene 176 versículos. El capítulo
con menos número de versículos es el Salmo 117, el cual tiene 2 versículos.
1.15 Referencias bíblicas.
El haber organizado la Biblia en capítulos y
versículos, dio lugar a una nueva forma de indicar con exactitud dónde
encontrar estos relatos específicos de la Biblia, son el método para indicar la
ubicación exacta de relatos bíblicos específicos.
Esto se puede hacer de dos maneras: Escrito o
Verbal.
1.15.1. Referencia escrita. Es
aquella que hace uso de las abreviaturas y los signos de puntuación para
mostrar donde se encuentra un relato bíblico específico.
EJEMPLO: Si desea escribir Juan capítulo 1 versículo 1 al 4 (1 - 4), se hace de
la siguiente manera:
Abreviatura Jn, 1: 1-4, Jn (esta es la
abreviatura del libro de Juan).
1. Estos dos puntos se usan para separar al capítulo de los versículos.
Este guión se usa para indicar de versículo
hasta qué versículo va la lectura
2. Este punto se usa para indicar que allí termina la cita.
Abreviaturas: Se usan
para los nombres de los libros. Únicamente la letra inicial es la mayúscula.
A
continuación mostraremos las abreviaturas de todos los libros de la
Biblia. Ver en su Biblia.
Signos de Puntuación. En su mayoría se usan únicamente para los números de los capítulos versículos.
A continuación mostramos los signos de
puntuación en las referencias bíblicas y su significado.
Punto (.). Se usa
para indicar que allí termina la cita.
EJEMPLO:
Ap. 1: 1 – 3.
Dos Puntos (:) Se usan
para separar al capítulo de los versículos.
EJEMPLO: Salmos 3: 1 – 5.
Coma (,). Se usa
para separar los versículos de un mismo capítulo.
EJEMPLO: Salmos 27: 1, 3, 5.
Punto y coma (;). Se usa
para separar capítulos de un mismo libro o de diferentes libros.
EJEMPLO: Jn. 2: 1 -12; 3; Hch 2; 9: 1 – 19.
Guión Corto (---). Significa
“hasta”. Se usa cuando una lectura
abarca más de un capítulo.
EJEMPLO: 2ª R. 22: 3 --- 23: 3.
Comillas (“). Significan
“textualmente” o “al pie de la letra”. Se usan cuando se va a escribir tal como
está escrito en la Biblia. Para comenzar se abren las comillas (“) y al
terminar se cierran (”).
EJEMPLO: “HERMANOS, ORAD POR NOSOTROS” 1ª Ts.
5: 15.
Puntos Suspensivos (…). E usa cuando no se va a escribir textualmente un versículo completo,
sino parte de él; ya sea de su comienzo, de su mitad, o de su final; y el lugar
de la parte que no se escribe, se coloca el punto suspensivo.
EJEMPLO: “…DIO A LUZ A SU Hijo… Lo envolvió en
pañales,… lo acostó en un pesebre…” Lc. 2: 27.
Letras Subrayadas (A, B, etc.). Indican la parte específica que se ha tomado de un versículo.
EJEMPLO: “…el Señor viene”. 1ª Co. 16: 22B.
Paréntesis (). Se usa
para encerrar una referencia bíblica escrita en medio de un párrafo o al final
de él.
EJEMPLO: Era tanta la entrega, ardor y amor que había en el apóstol Pablo, que
cuando escribió la segunda carta a Timoteo, aunque daba por terminada su
carrera y cercana su muerte (2ª Ti. 4: 6 – 8), sin embrago, estaban tan
dispuestos a consumirse totalmente en su ministerio, que le dice a Timoteo que
le lleve a Marcos porque era útil para el ministerio (2ª Ti 4: 11). Es decir,
da a entender que quería morir predicando, lo cual él mismo confirma (2ª Ti. 4:
16 – 18).
1.15.2. Referencia verbal. Es la
puntuación verbal de la referencia escrita sin mencionar abreviaturas ni
signos.
EJEMPLO: Jn. 3: 16 (referencia escrita)
Juan
capítulo tres versículo dieciséis (referencia escrita).
MATERIAL SUPLEMENTARIO
Diccionario Interno. Son los
pequeños numeritos o en su lugar, letras “n”.
Diccionario Externo. Glosario. Es el glosario que se halla al final de la Biblia.
Concordancia Interna. Son las letritas que aparecen debajo de los títulos o en los pasajes.
Concordancia Externa. Es la que aparece al final de la Biblia.
Tabla de pesas y Medidas. Está en la parte final de la Biblia.
Ayudas Especiales. Son las
ayudas propias de cada Biblia.
Mapas. Están
al final de la Biblia.
Biblias de Estudio. Son las
que traen un material de estudio más amplio.
1.16 La Biblia, la palabra de Dios. Dios nos dio su palabra usando tres (3) herramientas para que nosotros
pudiéramos obtenerla:
Revelación.
De Dios al hombre (el hombre oye lo que se
escriba). (Éxodo 17: 14).
Inspiración. Del
hombre al papel (el hombre escribe lo que Dios quiere que se escriba).
(Jeremías 30: 2).
Iluminación. Del
papel al corazón (el hombre recibe la luz de lo que Dios ha escrito). (Lucas
24: 31 – 32).
Hubo probablemente de 35 a 40 escritores de
los libros de la Biblia que durante un período aproximado de 1.500 años
escribieron los 66 libros de la Biblioteca Divina. Estas personas fueron de
edades diferentes que vivieron en épocas distintas, habitaron en diferentes
lugares, de diversas clases sociales, oficios y labores distintas, de niveles intelectuales académicos diferentes.
El diccionario de Webster define a la
inspiración de la siguiente manera: “Es la influencia sobrenatural del Espíritu
de Dios ejercida sobre la mente del hombre, influencia que capacitó a los
profetas, apóstoles y escritores sagrados para exponer la verdad divina sin
mezcla de error”.
Por su parte, el diccionario Espasa-Calpe
dice: “Intimación que Dios hace al escritor sagrado para que éste describa
acerca de una determinada materia, junto con una asistencia especial para que
no yerre en su exposición”.
De acuerdo a lo expuesto por el Dr. Gaussen,
inspiración es “el poder inexplicable
que el Espíritu Divino ejerce en los autores de las escrituras, para guiarles
aún en el empleo de los vocablos que deben usar, y preservarles de todo error u
omisión”.
1.16.2. La inspiración según la definición formulada
por el apóstol Pablo.
En este pasaje (2ª Timoteo 3: 16) es un soplo
recio, consciente, de Dios en el hombre, capacitando a éste para expresar la
verdad”, nos dice el Dr. Guillermo Evans. “Es Dios que habla por medio del
hombre, y por lo tanto el Antiguo Testamento es la Palabra de Dios tanto como
si Dios mismo hubiera pronunciado cada una de las palabras.
Las Escrituras son el resultado del influjo o
hálito divino, así como la respiración acompaña en el hombre la pronunciación
de palabras. La declaración de Pedro “se puede decir que indica que el Espíritu
Santo se encontraba presente en forma especial y milagrosa con los escritores de
las Sagradas Escrituras y en ellos, revelándoles las verdades que no habían
conocido antes y guiándolos igualmente en el registro de estas verdades, y en
todo acontecimiento que habían visto y oído, de manera que eran testigos
capacitados para presentarlos con suficiente exactitud a otros”.
Al leer la Biblia notamos que ésta tiene dos
(2) partes:
La parte hablada. Es lo que ella dice
que hablaron o dijeron.
La parte Escrita. Es todo lo que ella tiene
escrito.
Todos los que escribieron fueron inspirados
por Dios a escribir, es decir, todo lo que está escrito en la Biblia fue
inspirado por Dios a escribirse, pues “toda la escritura es inspirada por
Dios…”, (2ª Tim. 3: 16).
Sin embargo, los que hablaron no todos hablaron
de parte de Dios o inspirados por el Espíritu Santo, sino que fueron únicamente “…los santos
hombres de Dios…” los que “…hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo”
(2ª P. 1: 21).
Esto sucede porque la Biblia dice no solamente
lo que dijeron personas y seres buenos, sino también lo que dijeron personas y
seres malos.
EJEMPLOS:
En Génesis 22: 5 La Biblia dice lo que Abraham dijo
En Éxodo 33: 12 – 13 La Biblia dice lo que Moisés dijo
En 1ª Samuel 7: 3 La Biblia dice lo que Samuel dijo.
En 1ª Reyes 1: 32 La Biblia dice lo que David dijo.
En Juan 11: 25 La Biblia dice lo que Jesús
dijo.
En Hechos 5: 19 – 20 La Biblia dice lo que un ángel de Dios
dijo.
En Hechos 12: 11 La Biblia dice lo que Pedro dijo.
En Hechos 28: 17 – 20 La Biblia dice lo que Pedro dijo.
En Génesis 11: 3 – 4. La Biblia dice lo que los de la Torre de
Babel dijeron.
En Génesis 39: 7 La Biblia dice lo que la esposa
de Potifar dijo.
En Éxodo 5: 2 La Biblia dice lo que Faraón
dijo.
En Marcos 5: 12 La Biblia dice lo que los
demonios dijeron.
En Lucas 4: 3 La Biblia dice lo que el diablo
dijo.
En el caso de los que hablaron de parte de
Dios, el Espíritu Santo inspiró a estas personas a hablar y también inspiró a
los que y también inspiro a los que lo escribieron, a escribir. Ejemplo:
Génesis 41: 25 – 32.
El Espíritu Santo inspiró a José para que
dijera a Faraón la interpretación del sueño (Parte hablada).
Y también inspiró a Moisés para que lo
escribiera (Parte Escrita).
Pero en el caso de los que no hablaron de
parte de Dios, el Espíritu Santo no inspiró a estas personas a hablar, sin
embargo, si inspiró a los que las escribieron, a escribir. Ejemplo: Números 13:
27 – 33.
El Espíritu Santo no inspiró a los diez espías
lo que dijeron (parte hablada). Pero si inspiró a Moisés a escribirlo. (Parte
escrita).
De esta forma vemos que DIOS ES EL AUTOR de todo lo que se escribió en la Biblia, mas no de
todo lo que se habló.
Esto hace que haya una notable diferencia
entre la parte que comprende a las personas que hablaron y la parte que
comprende a las personas que escribieron, pues en el primer caso intervienen seres
buenos y malos, mientras que en el caso de los escritores, no hubo entre ellos
pecadores sino que todos los escritores de la Biblia fueron hombres santos que
conocían y temían a Dios.
Debido a todo lo anterior, la primera parte de
la Biblia, la parte hablada, se clasifica en tres (3) grupos:
Lo hablado de parte de Dios
Este grupo lo conforman:
Voz divina audible.
Ejemplos: Génesis 3: 8 – 19; Mateo 3: 17, 17: 5; Juan 12: 28.
Ángeles. Ejemplos.
Génesis 19: 1 – 2; 12 – 13, 15; Lucas 1: 26 – 37.
Hombres y mujeres de Dios. Ejemplos: 2ª Samuel 23: 2; 2ª Reyes 22: 14 – 20; Hechos 4: 8 – 12.
Pecadores.
Ejemplos: 2ª Crónicas 35: 21 – 22; 36: 22 – 23; Juan 11: 49 – 52.
Una asna.
Ejemplos.
Lo hablado humanamente
Es lo que la Biblia muestra que se dijo no por
inspiración del Espíritu Santo, pero tampoco pecaminosamente o por influencia
maligna. Este grupo lo conforman:
Hombres y mujeres de Dios. Ejemplo: Génesis 37: 33; Mateo 17: 4.
Pecadores. Ejemplo:
Hechos 26: 31 – 32, 28: 21 – 22.
Lo hablado no de parte de Dios
Este grupo lo conforman.
Hombres y mujeres de Dios. Ejemplos Génesis
12: 11 – 13; Números 12: 1 – 2; Mateo 16: 22 – 23; 26: 69 – 75.
Pecadores. Ejemplos: 1ª Samuel 17: 43 – 44;
Lucas 23: 21, 39; Hechos 19: 28, 34; 25: 9.
El diablo y espíritus malignos. Ejemplos: Job
1: 7, 9 – 11; 2: 2, 4 – 5; Hechos 19: 15.
L serpiente. Ejemplos: Génesis 3: 1, 4 – 5.
16.3. Paternidad.
La paternidad humana es la parte que
corresponde a aquellas personas que fueron usadas por Dios para decir bajo la
inspiración del Espíritu Santo lo que está escrito en la Biblia.
Ejemplos: Romanos 1: 1 dice: “Pablo,
siervo de Jesucristo…” 1: 7 dice: “a todos los que están en
Roma…”.
Esto quiere decir que la persona usada por
Dios para decir lo que está escrito en la epístola a los Romanos fue el apóstol
Pablo.
Entonces entendemos que el autor del libro de
los Romanos es el Espíritu Santo y la paternidad humana corresponde al apóstol pablo.
La doctrina de la inspiración, según se
encuentra en la Palabra, es muy sencilla empero la presentación de puntos de
vista erróneos y defectuosos hizo necesario “proteger” la doctrina mediante
definiciones amplias detalladas. En oposición a ciertas teorías, es necesario
sostener que la inspiración de las sagradas escrituras es:
Divina y no meramente humana. Los modernistas comparan la inspiración de los escritores sagrados con
esa clarividencia espiritual y sabiduría que desplegaron hombres como Platón,
Sócrates, Shakespeare, Cervantes y otros genios de la literatura, la filosofía
y la religión. Se considera así a la inspiración algo puramente natural. Esta
teoría despoja el vocablo inspiración de todo su significado, no es consecuente
con el carácter único y sobrenatural de la Biblia.
Única y común. Algunos
confunden la inspiración con la iluminación. La iluminación es la influencia
ejercida por el Espíritu Santo, la cual es común a todos los creyentes, y les
facilita comprender las verdades divinas (1ª Corintios 2: 4; Mateo 16: 17).
Afirman que tal iluminación es una explicación adecuada del origen de la
Biblia. Existe una facultad en el hombre, según se enseña, por la cual el
hombre puede conocer a Dios, algo así como un ojo del alma. En circunstancias
que los hombres piadosos de antaño meditaban en Dios, el Espíritu divino
vivificaba sus facultades, permitiéndoles el acceso a los misterios divinos.
Tal iluminación ha sido prometida a los
creyentes y ha sido experimentada por ellos. Pero no es lo mismo que la
inspiración. Se nos dice (1ª Pedro 1: 10 – 12) que a veces los profetas
recibieron verdades por inspiración, y al mismo tiempo les fue denegada la
iluminación para comprender esas verdades. El Espíritu santo inspiró esas
palabras, pero no creyó oportuno proporcionar el mensaje inspirado de esas
palabras. Se nos dice que Caifás fue el instrumento de un mensaje inspirado
(aunque no tuvo conciencia de ello) cuando aún no pensaba de Dios. En ese
momento era inspirado, pero no iluminado (Juan 11: 49 – 52).
Nótese las diferencias específicas entre la
iluminación y la inspiración:
Con respecto a duración, la iluminación es
permanente. La unción que el creyente ha recibido del Espíritu Santo permanece
en él, nos dice (1ª Juan 2: 20 – 27). Por otra parte, la inspiración era
intermitente, pues en efecto el profeta no podía profetizar a voluntad, sino
que estaba sujeto a la voluntad del Espíritu.
La iluminación admite, la inspiración no. La
gente disfruta de distintos grados de iluminación, pues algunos poseen mayor
penetración que otros. Mas en el caso de la inspiración, en el sentido bíblico,
una persona es obra inspirada o no lo es.
Mas en el caso de la inspiración, en el
sentido bíblico, una persona es obra inspirada o no lo es.
Viva y no mecánica. La inspiración no significa dictado, no que los escritores adoptaban una actitud pasiva y su mente no tomaba parte alguna en la escritura del material.
Dios no habló por medio del hombre como hablaría por medio de un megáfono. Su Espíritu Divino usó las facultades del hombre, produciendo así un mensaje perfectamente divino que no obstante ostenta las características de la personalidad del escritor. Es la Palabra del Señor, más en cierto sentido, la de Moisés o Isaías o Pablo. “Dios no ha hecho nada sin el hombre; el hombre, no ha hecho nada sin Dios. Es Dios quien habla en el hombre, Dios que habla por medio dl hombre, Dios que habla como hombre, Dios que habla a favor del hombre”.
La verificación de las Escrituras.
Afirman ser inspiradas. ¿Reclaman para sí el Nuevo Testamento una inspiración similar? En
particular, la inspiración de los evangelios está garantizada por la promesa de
Cristo de que el Espíritu traería a la memoria de los apóstoles todas las cosas
que les había enseñado y que el mismo Espíritu les guiaría a toda verdad. En
todas partes el Nuevo Testamento afirma dar una revelación más amplia y clara
de Dios que la que proporciona el Antiguo Testamento, declarando con autoridad
la abrogación de las antiguas leyes. Por lo tanto, si el Antiguo Testamento es
inspirado, también lo es el Nuevo.
Tienen toda la apariencia de inspiradas. Las sagradas Escrituras afirman ser inspiradas, y un examen de ellas
revela el hecho de que su carácter sustenta o apoya esa información. La Biblia
se presenta ante el tribunal, por así decirlo, con un buen testimonio. Con respecto a sus autores, la
Biblia fue escrita por hombres cuya honestidad e integridad no puede ser puesta
en tela de juicio.
Con respecto a su contenido, encierra la
revelación más sublime de Dios que conoce el mundo; y en lo que respecta a
influencia, ha proporcionado luz salvadora a naciones e individuos y posee un
poder infalible de conducir hombres a Dios y transformar su carácter; en lo
referente a autoridad, llena los requisitos de corte penal de apelaciones en
religión, de manera que los cultos falsos hayan necesario citar sus palabras
con el objeto de hacer impresión en el público.
Interpretación de la Biblia.
La interpretación de la Palabra de Dios no se
ha dejado a merced de lo que a cada uno se le ocurra cuando la lee o cuando la
escucha; sino que hay principios fijados en la misma Biblia que conducen y
llevan a una interpretación correcta de las Sagradas Escrituras.
1.17.1. Definición. Interpretar
es explicar o aclarar el sentido, tras la interpretación y hacer el proceso de
indagación. Uno tiene que examinar la Biblia antes de explicarla, pues la
primera pregunta debe ser ¿qué decir? La segunda ¿Qué significa? Muchos de los
errores de la interpretación han procedido de la negligencia en averiguar
principalmente lo que dice la Biblia. Recordemos que es un libro escrito para
toda la raza humana, para los pobres, ignorantes, lo mismo que para los ricos y
educados.
17.2. Reglas de interpretación:
Acepta el sentido literal de las palabras. Hay partes que son alegorías y contienen muchas parábolas y símbolos,
pero la Biblia misma nos dice siempre cuando es alegoría. Ejemplo: apocalipsis
17: 1 – 5. Se ve una mujer sobre cuya cabeza está escrito un misterio:
“Babilonia la grande…”, de eso podemos entender que el pasaje es alegórico y
que no fue una mujer en sentido literal sino un símbolo de una mujer mala que
vio Juan en la visión, pero en Lucas 16: 19 había un hombre rico… de lo cual
entendemos que es una historia literal.
Compara un pasaje por otro. Se cuenta el caso de una mujer que gustaba especialmente de la lectura
de la Biblia porque 2tenía tantos textos bonitos”. `parece que algunas
personas leen así, esperando encontrar algún texto bonito. A tales lectores
parece no importarles el lugar donde encuentran las palabras, ni la conexión
que tenga con el resto del pasaje. Ejemplo: Algunos predicadores creen
encontrar en el Salmo 2: 8 una base para su mensaje “Pídeme y te daré por
herencia las naciones, y como posesión tuya los confines de la tierra”;
reclaman las naciones en salvación para Cristo, pero el contexto Salmos 2: 9 da
a entender algo distinto.
Acuérdate del fin o propósito de las
escrituras. 2ª Timoteo 3: 15 – 17; Juan 20: 30 – 31. La
Biblia no es un libro científico, tampoco es un libro histórico, su fin nunca
ha sido enseñar la historia ni la ciencia, sino enseñar al hombre cómo
acercarse a Dios.
Examina siempre el contexto de un pasaje. Hay palabras y frases que son usadas en distintos sentidos en la Biblia
y el sentido correcto se puede distinguir al escudriñar el contexto o lo que
precede y lo que sigue a dicho pasaje.
Acepta la Biblia con una revelación de
Jesucristo. Jesús vino en forma humana para manifestarnos
al Padre, pues él se llama Verbo o Palabra de Dios. La Biblia es la palabra
escrita de modo que el cuerpo humano de Jesús manifiesta el Trino Dios, así la
Biblia lo manifiesta y lo revela en todas sus partes, así en la historia y en
la poesía, en los evangelios y en las epístolas.
No espere siempre comprenderlo todo. De modo que Jesús Dios-hombre es inescrutable e incomparable por la mera
sabiduría humana, así su palabra es muy ata en su divina enseñanza y la mente
humana no es capaz de comprender todas las profundidades.
Busca a cada paso la iluminación del Espíritu
Santo. No puede haber mejor ayuda en comprender un
libro, que el privilegio de preguntarle al mismo autor su sentido.
El Espíritu Santo es el autor de todas las
escrituras, pues si lo tenemos a él con nosotros, siempre podemos pedir ayuda
en la interpretación y preguntarle a cada paso cuáles son las verdades
especiales que quiere grabar en nuestra memoria.
El que estudia la Biblia sin la ayuda e
iluminación del Espíritu, está comiendo la cáscara de la sandía y tirando la
fruta, está poniendo una lámpara en la mesa sin llenarla de aceite.
En esta parte queremos compartir estos
principios bíblicos con usted:
Todo lo escrito en la Palabra de Dios tiene un
propósito; ninguna parte está en vano y las Sagradas
Escrituras están completas: ni les falta, ni les sobra. Santiago 4: 5; Juan 20:
30 – 21: 25; 20 – 31; Mateo 5: 18; Lucas 16: 17; Apocalipsis 22: 18, 19.
Para formular una interpretación bíblica es
necesario y fundamental entender toda la Palabra de Dios. Hechos 8: 30; Mateo 24: 15
- 1ª Timoteo 1: 3 – 7; Mateo 15:
10; Nehemías 8: 8.
La Palabra de Dios tiene pasajes difíciles de
entender y la profecía y el conocimiento es en parte. 2ª Pedro 3: 15 – 18 (16,
17); 1ª Corintios 13: 9 – 12; Deuteronomio 29: 29.
Ninguna interpretación de alguna parte de la
Palabra debe contradecir otra parte de la Palabra, toda la palabra de Dios debe
concordar. 2ª Pedro 1: 20
- Mateo 4: 1, 5 – 7; Hechos 15: 15.
La Biblia en su totalidad no está de manera
literal. Para interpretar la Biblia, en necesario conocer las formas en las que
está escrita.
Sentido figurado. Es la
réplica del modelo original. Hebreos 8: 5, 11: 19, 9: 23 – 24; Romanos 5: 14.
Sentido espiritual. Es el
remplazo de una identidad real por una ajena que amerita la comparación en el
respectivo caso. Ejemplo: Apocalipsis 11: 8 dice: “…la grande ciudad que
en sentido espiritual se llama Sodoma…”. Sabemos que cuando a Juan se
le mostró esto, Sodoma no existía, tenía alrededor de 2.000 años de haber sido
destruida, pero por haber quedado como ejemplo de maldad y pecado, es tomada
aquí para representar a la ciudad de Jerusalén. Esto se confirma al final del
versículo cuando se le dice a Juan: “…donde también nuestro Señor fue
crucificado” (8). Es decir, Jerusalén, donde Cristo fue crucificado. Lo
mismo sucede con Isaías 1: 10.
Sodoma. Son
aquellos hechos cuyo propósito no se limita a su época, sino que también
representan el plan de Dios para el porvenir. Colosenses 2: 16 – 17; Hebreos 8:
5.
Símbolos. El
símbolo es la forma usada para tipificar. Zacarías 3: 8.
Parábolas. Sus
historias no reales, son enseñanzas espirituales. Mateo 13: 1 – 3, 24, 31, 33,
34; 21: 33, 22:1; Lucas 13: 6, 15: 3, 18: 1,9.
Alegorías.
Narraciones con aplicaciones espirituales. Juan 10: 6, 16: 25, 29; Gálatas 4:
24.
Enseñanza. Es el
uso espiritual a todo lo escrito. Romanos 15: 4.
Ejemplo. Todo
lo bueno y todo lo malo que está escrito en la Biblia, se escribió para que
nosotros veamos cuales son las consecuencias en ambos casos, y escojamos cuál
ejemplo seguir. 1ª Corintios 10: 1 -11 (6, 11); 2ª Pedro 2: 1 – 6; Judas 7;
Santiago 5: 10; 1ª Pedro 2: 21; Hebreos 6: 11 – 15 (12).
El canon de la
Escritura.
La palabra canon se deriva del griego que
significa: Una caña de medir o una regla. La usa la iglesia cristiana en el
sentido de ser la regla, estatuto o reglamento de lo que cree, especialmente en
cuanto a los libros divinamente inspirados y aceptados como autorizados por la
iglesia universal.
La palabra de halla en tres pasajes del Nuevo
Testamento: Gálatas 6: 16; Filipenses 3: 16; 2ª Corintios 10: 13 – 17.
Fue Anastasio de Alejandría cerca del año 300
d. C. que primero aplicó la palabra canon al catálogo de libros inspirados de
la Biblia. El canon del Antiguo Testamento fue cerrado por Esdras y sus
compañeros piadosos que formaron la gran sinagoga, cerca de 400 a. C. lo
dividieron en tres partes:
La ley de Moisés.
Los profetas.
Los Salmos o Escrituras Santas.
El canon del Nuevo Testamento fue fijándose
poco a poco por la iglesia durante los primeros dos siglos d. C. Desde el
comienzo los cuatro (4) evangelios, Hechos, trece (13) epístolas de Pablo, 1ª
de Pedro y 1ª de Juan, eran aceptados como crónicas por todas las iglesias y no
hubo duda de su inspiración ni de su autenticidad. Acerca de Hebreos, Santiago,
2ª de Pedro, 2ª, 3ª de Juan, Judas y
Apocalipsis, había pocas dudas en algunas iglesias. Podemos ver aquí con cuanto
cuidado e investigación minuciosa la iglesia primitiva forma su canon y el
hecho de que estos siete (7) libros fueron últimamente aceptados como
inspirados por la iglesia nos da mucha confianza en ello.
El canon de los libros del Nuevo Testamento
fue confirmado por el concilio de Cartago en el año 397 d. C.
Algunos preguntan por qué es necesario tener
un canon de las Sagradas Escrituras, podemos contestar:
Para que tengamos una revelación completa de
Dios
Para que tengamos una revelación escrita
Para excluir los muchos libros europeos que
fueron escritos en los siglos después de Cristo, pero que según la declaración
de todas las iglesias, no están las señales de la inspiración.
Los libros
apócrifos
La palabra apócrifo significa “falso o in auténtico” y muchas veces se
usaba para las enseñanzas secretas de algunas sectas que no revelaban sus
enseñanzas sino a sus adeptos.
En la iglesia primitiva vino a significar los escritos apocalípticos o
difíciles de comprender. Y más tarde los que eran europeos, heréticos o
falsificados.
En una palabra, los libros apócrifos son los que no han sido reconocidos
como canónicos por los judíos (hablan del A. T.) y la iglesia cristiana.
Los libros apócrifos del Antiguo Testamento son:
1ª de Esdras.
2ª de Esdras.
Tobías.
Judith.
Los restantes de Ester.
La sabiduría de Salomón.
Eclesiástico.
Macabeos.
Epístolas de Jeremías y Baruc.
Cantar de los tres (3) jóvenes santos.
La historia de Susana, Bel y de dragón.
Oración de Manasés.
2ª de Macabeos.
He aquí razones para rechazar los libros apócrifos del Antiguo
Testamento:
Un acuerdo genera que nunca fueron incluidos en el canon hebreo.
Nunca fueron citados por nombre en el Nuevo Testamento por Jesús ni por
sus apóstoles aunque ya existían.
Josefa, historiador judío, año 200 d. C. los omite enumerando solamente
los libros que los judíos reconocían inspirados por Dios.
Filón, el judío, el gran filósofo de Alejandría 20 a. C. hasta 50 nunca
mencionó los libros apócrifos.
No se hallan en los catálogos de libros canónicos hechos durante los
primeros cuatro siglos d. C.
Jerónimo, 400 d. C. declara que el canon hebreo consiste en los mismos
39 libros.
Ellos mismos nunca declaran inspiración divina.
No tienen elemento profético verdadero, ni hablan como un mensaje de
Jehová.
Contienen muchos errores históricos, geográficos y cronológicos, se
contradicen a sí mismos.
Ellos enseñan doctrina y aprueban prácticas en contra de las enseñanzas
bíblicas.
Se nota en un estilo una rapidez y falta de originalidad.
Muchas de sus historias son legendarias y cuentos absurdos.
Aun lo que podemos llamar su nivel espiritual y moral, está muy por
debajo de los libros del Antiguo Testamento.
Los libros apócrifos fueron escritos después del Antiguo Testamento
cuando ya su canon se había cerrado.
Todo esto nos da una clara identidad de que la Biblia es la Palabra de
Dios por sus elementos sobrenaturales que la identifican:
Su indestructibilidad. Los martillos de la persecución, la burla, la crítica
superior, el liberalismo y el ateísmo han dado sus malvados golpes en el yunque
divino de la Palabra de Dios, por los siglos todos los golpes han sido en vano.
Ahí yacen, en monitores de chatarras oxidadas, mientras que el gran yunque de
las Escrituras permanece entero, inmovible y sin estilar. (Mateo 24: 35).
Su precisión histórica. Hasta hace menos de un siglo los agnósticos se
deleitaban en hacer referencias burlonas a los “cientos de errores históricos”
de la Biblia. Pero después llegó a la ciencia de la arqueología y con cada pala
llena de tierra, las burlas se han vuelto menos visibles, hasta que hoy casi no
se pueden ver. (Isaías 40: 12, 15 – 17).
Su precisión científica. Todas las declaraciones científicas encontradas en las
Escrituras deben ser tomadas literalmente. La Biblia condensa muchas más
declaraciones científicas que las que hasta hoy se han comprobado. (Isaías 40:
21 – 22).
Su posición profética. Unas de las pruebas de fuego de cualquier religión es
su habilidad para predecir el futuro. En esta área (como en todas las demás) la
Biblia reina de forma suprema. Se puede buscar en vano en las páginas de otros
escritos sagrados para encontrar aunque sea una sola línea de profecías
acertadas (Isaías 41: 22 – 23; 44: 7).
Su influencia universal en la civilización: (Isaías 41: 4 – 5).
La civilización occidental está fundada directamente sobre la Biblia y
sus enseñanzas. Su misma manera de vivir tuvo su origen en Hechos 16: 9 cuando
Pablo, obediente a su visión celestial, dirigió su segundo viaje misionero a Europa
en vez de Asia y Oriente.
El calendario mundial y la mayoría de sus días feriados emanan de la
Biblia. (Génesis 1: 14; Salmos 104: 19).
Fue la Biblia quien cambió el salvajismo reinante en las islas
Británicas a la decencia. (Juan 8: 31, 32).
La Biblia ha influenciado y dirigido, el avance de todas las bellas
artes:
Literatura.
Artes plásticas (Éxodo 31: 1 – 6)
Música (1ª Crónicas 15: 16 – 24; 25: 1, 6 – 8; 1ª Crónicas 23: 5).
La Biblia ha producido las leyes del mundo occidental. Las primeras
formas de gobierno como el derecho consuetudinario inglés, la declaración de
derechos, la carta magna y la propia constitución de Estados Unidos de América
están todos arraigados en los diez mandamientos que Dios le entregó a Moisés en
el Monte Sinaí (Éxodo 20).
Su cuidado y reproducción. En la historia no ha habido un libro tan
copiado tantas veces y con tanto cuidado como la Palabra de Dios. Apocalipsis
22: 19).
Su asombrosa circulación. Es el libro que más se ha traducido en el
mundo, el que más se ha publicado y que más se ha vendido en el mundo. (Amos 8:
11).
Su honestidad absoluta. “La Biblia no es un libro que el hombre podría
escribir si quisiera hacerlo, no que escribiría si pudiera hacerlo”, aunque el
hombre tuviera toda la espiritualidad necesaria, no sabría los datos
involucrados en las declaraciones históricas, científicas y proféticas, que ya
hemos visto en la Biblia. Por tanto sin la dirección de Dios, la Biblia no es
un libro que el hombre podría escribir si quisiera hacerlo. (Apocalipsis 1:
11). (Isaías 44: 7).
Su poder para transformar vidas. Según un antiguo proverbio: “por la muestra se
conoce el paño”, así es. Sin duda, la mayor prueba de que la Biblia
verdaderamente es la Palabra de Dios, es su asombrosa capacidad de cambiar a la
humanidad corrupta. La misma Biblia da testimonio de su origen divino. (2ª
Timoteo 3: 16 – 17).
Eterna y autorizada. Es
probable que ningún otro personaje del Antiguo Testamento tuviera un concepto
más claro de la verdad y de la autoridad de la Palabra de Dios que el salmista
David, quien describe: “Para siempre, ¡Oh Jehová, permanece tu palabra en
los cielos!”. (Salmos 119: 89). “Secase la hierba, marchitase la
flor; mas la palabra de nuestro Dios permanece para siempre” (Isaías
40: 8).
Aquí David recalca que la Biblia no es un
producto del tiempo, sino de la eternidad. Contiene el pensamiento y el consejo
eterno de Dios, formado antes de lo comienzos de los tiempos o de la fundación
del mundo. Fueron proyectados por medio de canales humanos desde la eternidad
hasta este mundo de tiempo, pero cuando el tiempo y el mundo pasen, el
pensamiento y el consejo, de Dios revelados en la Escritura permanecerán
inconmovibles e inmutables. Esta misma idea la expresa Cristo: El cielo y
la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán”. (Mateo 24: 35).
Conclusión.
Lo que sigue es un merecido tributo a lo que
la Biblia dice:
“Este libro contiene los pensamientos de Dios.
La condición del hombre, el camino de salvación, sus preceptos irresistibles,
sus historias ciertas, sus decisiones inmutables. Léala para ser sabio, créala
para ser salvo y practíquela para ser santo. Contiene luz para guiarte,
alimento para nutrirte y consuelo para animarte. Es el mapa de los viajeros, la
brújula del piloto, la espada del soldado y la regla de conducta del cristiano.
Aquí se ve el paraíso restaurado, el cielo abierto y el velo descorrido acerca
del infierno. Cristo es su tema principal, nuestro bien su propósito y la
gloria de Dios su fin, léela despacio, frecuentemente y con oración. Es una
mina de riquezas, un paraíso de gloria y un río de placer. Recompensa el empeño
puesto en la lectura; y condena a todos aquellos que tienen en poco su sagrado
contenido. Es el libro de los libros, el libro de Dios, la revelación de Dios
al hombre”
Lo narrado en la Biblia no se escribió con el
propósito de mostrar el desarrollo de alguna nación, imperio o civilización
(aunque de hecho lo hace); ni menciona a las personas que menciona porque estas
por su grandeza, poderío o importancia lo hayan merecido.
A partir de Génesis capítulo 12, todo aquello
que aparece en la Biblia, aparece allí únicamente porque en alguna manera tuvo
que ver con el pueblo de Israel, pueblo que Dios escogió para preparar el
linaje humano a su Hijo Jesucristo para la redención del mundo.
Así que este es el propósito de la Biblia: Mostrar
como vino Cristo al mundo y para que vino. Jesucristo mismo lo manifestó
cuando hablando de las Sagradas Escrituras dijo: “…ellas son las que dan
testimonio de mí” (Juan 5: 39).
Recomendaciones.
Te recomiendo estos textos para que los
aprendas de memoria: (Hebreos 1: 1 – 2; Hebreos 2: 3 – 4; 2ª Timoteo 3: 16 –
17; 2ª Pedro 1: 19 – 21).
Hermano (a)
_____________________________________________, deseamos en el Señor que el
Espíritu Santo coloque en tu corazón hambre de su palabra, para que seas un
ferviente estudioso de las Escrituras en esta carrera que ha comenzado (Efesios
6: 24).