DIOS TRAE BENDICIÓN

DIOS TRAE BENDICIÓN

“Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.” 2 Crónicas 7: 14.

La prosperidad material no es una señal tangible de la bendición de Dios en tu vida, existen unos requisitos básicos para ser prosperados en Dios. Primero aclaro que quien hace prosperar tu camino eres tú mismo. Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien.” Josué 1:8

El hecho de vivir para Dios nos trae prosperidad integral, la prosperidad de Dios es integral no es desnivelada en algunas áreas pero para recibirla debemos ser obedientes y humildes en Cristo Jesús.

Cuando una persona prospera materialmente no necesariamente  quiere decir que vive una vida recta con Dios, la prosperidad financiera puede venir a través de actividades ilícitas o no aprobadas por Dios, obviamente este tipo de prosperidad no trae salvación, o no hay vida eterna en ella. “La bendición de Jehová es la que enriquece,

Y no añade tristeza con ella.” Proverbios 10: 22

Ahora bien, para que haya bendición de Dios en nuestras vidas necesitamos primero que todo humillarnos. La humillación es un acto de sumisión, es asumir una posición más baja ante los demás, Jesús se humilló ante la sociedad hasta la muerte, él nos dio el más grande ejemplo de humillación, pero no todos estamos dispuestos a hacerlo, nuestra altivez y nuestro ego algunas veces nos impiden humillarnos, cuando el creyente asume una posición de arrogancia y altivez no puede relacionarse correctamente con nuestro Creador porque él mira al altivo de lejos, mientras que al humilde lo atiende, el deseo de Dios para nuestras vidas es bendecirnos integralmente pero para que podamos recibir esa bendición necesitamos ser humildes.

La biblia habla de un alto oficial del ejército de Siria llamado Naamán fue sanado cuando comprendió el valor de la humildad y la obediencia (2 Reyes 5: 1- 27), de modo que ser humilde genera bendición de Dios.

Otro requisito que necesitamos para ser bendecidos por Dios está en la oración.

La oración es fuente de poder, a través de la oración podemos sumergirnos en la presencia de Dios, podemos comprender el propósito de Dios en nuestras vidas y recibir fortaleza espiritual para enfrenta el mundo que nos rodea. La oración es la clave del éxito en el cristiano, el cristiano que no ora, está siempre en peligro, está expuesto a ser envestido por el enemigo y a caer en tribulación constantemente, cuando usted ora, Dios lo previene de los peligros que hay en el camino y lo ayuda a superar los obstáculos que se le presenten en la vida, no deje que su vida cristiana mengue en la oración porque esto puede originarle graves problemas espirituales y dificultades en su relación con Dios, él está ansioso de escuchar su voz de oír sus peticiones y ruegos, cuando usted ora y ruega a Dios, lo está reconociendo en su vida como su Señor y esto le agrada a Dios, Dios responderá nuestras oraciones, la palabra de Dios nos da claros ejemplos del poder de la oración. (Elías oro y fuego cayó, Moisés oro y el mar se secó, la parábola de la viuda y el juez injusto) es otro ejemplo claro de la importancia de la oración ferviente en el creyente para obtener prosperidad en la vida, la biblia dice que debemos orar en todo tiempo y por nuestros gobernantes (1 Timoteo 2: 1, 2 -  Santiago 5: 13 – 16), por nuestros pastores y por nuestras peticiones con todo ruego y suplica, también dice que la oración del justo puede mucho y dice que la oración de fe salvará al enfermo y si hubiere cometido pecados le será perdonados.

Otro requisito de Dios para ser bendecidos es buscar su rostro

Muchos creyentes se equivocan pensando que la prosperidad la consiguen cuando buscan los bienes materiales y se afanan en ello, es cierto que todos tenemos que trabajar y producir para sostener nuestras familia y a nuestros hogares pero eso no debe ser lo primero en nuestras vidas, debemos buscar el rostro de Dios y ponerlo a él primero en nuestra vida financiera para ser prosperados, debemos buscar el reino de Dios y su justicia y las demás cosas vendrán por añadidura, las bendiciones de Dios, su paz y su prosperidad vienen como consecuencia de buscar el rostro de Dios y ¿cómo podrá lograrlo? Esto se logra cuando usted atiende primero las cosas del reino y cumple con los mandamientos de Dios en su vida y en su familia así como también en el trabajo, en la escuela o en la universidad, cuando usted camina con su rostro orientado hacia Dios, entonces las bendiciones de Dios lo perseguirán y o alcanzarán según Deuteronomio 28.

Otro requisito básico para ser prosperado por Dios lo conseguimos cuando nos convertimos de nuestros malos caminos.

La prosperidad integral de Dios en un creyente llaga a medida que la persona abandona su vieja manera de vivir, es absurdo pretender ser prosperado por Dios cuando nuestros caminos son torcidos, cuando seguimos siendo impíos o cuando decimos ser cristianos pero actuamos como impíos, Dios quiere que cambiemos nuestra vieja manera de vivir, Jesús lo explicó a través de sus parábolas cuando dijo, nadie puede poner vino nuevo en odres viejos porque el vino rompe el odre y se pierden tanto el odre como también el vino  pero si ponemos vino nuevo en odres nuevos, ambos se conservan (Mateo 9: 17), o poner remiendo nuevo e vestidos viejos, se hace peor la rotura. (Mateo 9: 16).

De modo que debemos cambiar, de forma de actuar, de forma de pensar, de forma de vivir y dar frutos dignos de arrepentimiento, así llega la prosperidad de Dios a nuestras vidas, entonces dice la biblia que Dios oirá desde el cielo, perdonará nuestros pecados y sanará nuestra tierra. Quiere decir que cuando no cumplimos los requisitos para ser prosperados por Dios, nuestra oración no puede ser oída, no pasa del techo, cuando cumplimos los requisitos que Dios nos exige, él nos da su perdón, la justificación la remisión de nuestros pecados se obtiene por esa fe y esa obediencia, la sangre de Cristo opera a través de la fe y también de la obediencia, cuando cumplimos a cabalidad con las exigencias de Dios para nuestras vidas, es entonces cuando Dios sana nuestra tierra y sanar nuestra tierra quiere decir bendición integral, cielos abiertos para nuestra vida, paz en el hogar y bendiciones espirituales y materiales, usted quiere ser prosperado por Dios pase al frente.